El Málaga CF no le marca un gol ni al arcoíris, que diría aquel. Esa está siendo la principal condena de conjunto blanquiazul especialmente en este tramo final de la temporada, en el que sólo lleva una victoria en los últimos siete encuentros. El conjunto de Pellicer, que trató de explicarlo sin convencer, es el que menos dianas suma de los cinco que ocupan puestos de ascenso o playoff. 

Los números son crueles con el Málaga, y por eso no ha peleado en ningún momento por el ascenso directo y ya dejó ir también la segunda plaza. Además, es incapaz de alcanzar al Ibiza cada vez que se lo pone en bandeja. 

De los cinco primeros clasificados, Castellón -ya ascendido-, Córdoba, Ibiza y Ceuta, los de Sergio Pellicer son los que menos goles llevan a falta de tres jornadas para que finalice la liga regular. El líder suma 72 goles, casi 30 más que el Málaga; el Córdoba 61; el Ibiza 53; el Málaga 45; y el Ceuta 48. Además, en el grupo 2 hay otro equipo con más goles que los blanquiazules, el Atlético de Madrid B, que suma 50 dianas. 

La capacidad goleadora del Málaga CF se ha visto mermada en la segunda vuelta del campeonato, cuando sólo ha anotado 16 goles con respecto a los 29 de la primera vuelta. Por ahí se le han ido a los de La Rosaleda todas las opciones de estar cerca de lo más alto de la clasificación. 

En el Grupo 1, de todos los implicados en el ascenso, tres de los cinco primeros también han anotado más goles que el Málaga: Deportivo de La Coruña, 59; Barcelona Atlètic, 56; y Celta B, 62. Nástic y Ponferradina han anotado 35 cada uno. 

Cierto es que el Málaga está en el podio de los menos goleados con 23 tantos en contra, los mismos que la Ponferradina y uno más que Nástic. Con diferencia, es el que menos goles ha encajado en su grupo. Pero sin goles no hay victorias, y en la mayoría de los últimos partidos Alfonso Herrero en algún momento tiene que recoger el balón de su portería. 

Tras el partido contra el Mérida se le preguntó a Sergio Pellicer por esta sequía. El de Nules intentó explicar, sin llegar a convencer, lo que le ocurre a su equipo cuando está delante de la portería: "Me preocuparía que no se generase. Hoy se ha generado con un rival que metía a 10 jugadores en el área. Hay que ir cambiando de zonas para desgastar al rival. Me da rabia a nivel personal. Porque les veo entrenar y de diez, siete son gol. Tenemos que seguir insistiendo. A nivel ofensivo nos falta ese último pase. Me gustaría que en los próximos partidos generáramos como hoy, pero siendo más precisos. Ha habido partidos que hemos generado menos y hemos conseguido la victoria porque hemos sido más eficaces". Con esta explicación, parece que en el Málaga no se juega como se entrena.

Sea como fuere, Pellicer y los suyos tienen que encontrar la fórmula porque en la posición en la que se encuentra el Málaga de cara al playoff, en desventaja de campo a falta de tres jornadas para el final de liga, le van a hacer falta los goles si quiere ser equipo de Segunda.